casa 33

el proyecto de toda una vida…

Hoy os muestro otro de los portales de mi ciudad en los que he intervenido. En esta ocasión, mi estilo ha quedado diluido por las pautas que estableció el cliente desde un principio. La obra ha sido compleja a nivel técnico y ha incluido la reforma de la sala de calderas y un local comercial existentes bajo el portal, en la planta de sótano.

La madera de iroko posee un gran protagonismo en esta obra, ya que desde las puertas salta a las paredes para aportar un mayor grado de calidez. Un detalle de ornamentación vegetal en color verde sería un gran acierto para contrastar con el color natural de la madera, pero la comunidad ha desechado mi propuesta.

En conclusión, este nuevo espacio acondicionado resulta mucho más neutro y estable que en otras de mis intervenciones, pero estoy seguro que perdurará en el tiempo perfectamente.

¡Hasta pronto!